El color amarillo, el escudo del club, el Estadio Carranza… están presentes en la decoración de nuestras casas, en la forma de vestir, en nuestras calles o tiendas mezclándose ciudad, gaditano y cadismo.
En definitiva, el Cádiz CF ha traspasado las fronteras del terreno de juego, se ha salido de los 120 x 90 y se ha colado en el día a día de los cadistas. Cuando te vistes con una camiseta amarilla un día cualquiera, cuando decoras el coche con el escudo de tu equipo, cuando te secas con una toalla amarilla y azul, cuando cuelgas el póster de la plantilla en tu habitación el Cádiz CF está siempre contigo: física y sentimentalmente.
Con la Campaña de Abonados 2008/09 la entidad quiere demostrar que el Cádiz CF va más allá de un simple partido de fútbol. El cadismo es una forma de vida, una filosofía y tiene sus propios símbolos que lo diferencian del resto.
La ciudad está inundada de los colores que nos identifican: el amarillo y el azul. El espíritu cadista está presente en nuestra rutina diaria. Por ello, hemos recreado momentos cotidianos en la vida de las personas rodeados de imágenes habituales donde el cadismo aparece por todas partes.
La campaña ‘Parte de mi vida’, ideada por el Grupo Imagen y que arranca estos días en prensa y en la calle, intenta reflejar el sentimiento cadista de esta afición que ha asumido al Cádiz CF como parte de sus quehaceres diarios, o de sus costumbres… en definitiva, como parte de su vida.
