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Historia

Reseña histórica: Todos por la tapia

El Área de Historia nos recuerda las vicisitudes que pasaba el equipo hasta que pudo disponer de El Rosal para entrenar

Hace como 35 años el Cádiz CF no disponía de ningún terreno alternativo al Carranza para realizar sus entrenamientos.  Actualmente el equipo amarillo dispone de unas magníficas instalaciones deportivas como es la “Ciudad Deportiva Bahía de Cádiz”, conocida con anterioridad como “Instalaciones Deportivas de El Rosal”. 

Se trata de un complejo deportivo donde el Cádiz CF realiza a diario sus entrenamientos, así como donde sus secciones inferiores juegan los partidos oficiales. Ubicada en el término municipal de Puerto Real (Cádiz), en la barriada del “Meadero de la Reina”, se inauguró en septiembre de 2006​ tras acometerse unos trabajos de remodelación total de las antiguas instalaciones.

Pero la entidad cadista no disfrutó de estas instalaciones hasta que en julio de 1985, la junta directiva de la “Peña Cadista”, entidad presidida por el ex–presidente cadista Manuel de Diego, en asamblea de accionistas, decide ceder al Cádiz CF sus instalaciones sociales. El equipo amarillo llevaba años intentando encontrar un lugar para construir unas instalaciones donde poder realizar los entrenamientos y reservar así el césped del estadio Carranza, único lugar, junto a la propia playa “Victoria”, donde el equipo podía entrenarse a diario.

Precisamente, en aquella temporada 85/86, cuando se celebraba el 75 aniversario de la entidad y se afrontaba la cuarta experiencia en la máxima categoría del fútbol nacional, las fuertes lluvias caídas a finales de diciembre de 1985 y primeros días de 1986, hacen que para preservar el césped del Carranza, que está en lamentable estado, se entrene a las órdenes del míster Paquito en los alrededores del estadio y detrás de la portería de Fondo Sur, sobre un piso duro de adoquines con riesgo de resbalones peligrosos.

En ocasiones, sobre todo cuando llueve mucho, la plantilla se desplaza al Pabellón “Fernando Portillo” para ejercitarse en sus pistas de parquet. Es más que lamentable que un equipo de Primera División no disponga de otro lugar de entreno que el estadio donde celebra sus partidos oficiales. Se hacen más que necesarias unas instalaciones mientras no se pueda disponer de los terrenos de “El Rosal”.

La directiva cadista realiza las gestiones oportunas y consigue que se les permita entrenar en el campo de “La Bazán”. Cuando el plantel se presenta en dichas  instalaciones deportivas de San Fernando, la sorpresa es que tampoco el césped de “La Bazán” está idóneo, encontrándose bastante blando. Ante esto y la insistencia del responsable de las instalaciones de que se tuvieran mucho cuidado con el campo, hacen que Paquito opte finalmente por cargar los bártulos en el autocar y trasladarse hasta los terrenos del Club Gayro, ubicados también en San Fernando. Una vez allí, se encuentran con el recinto cerrado, dado que solo se abre por las tardes para el entrenamiento del Cádiz CF B, estando ilocalizable el encargado de estas instalaciones deportivas. Ante tal dificultad, técnico y jugadores acuerdan “asaltarlo”, procediendo para ello a escalar, unos por la cancela de entrada y otros por la tapia de la fachada, para de esta furtiva manera, acceder al recinto deportivo, dando lugar con ello a una situación insólita y esperpéntica para un equipo de la máxima categoría del fútbol español. Los profesionales de la plantilla cadista se lo toman con buen humor y nadie se niega a intentar “el más difícil todavía”.

Ya en días posteriores el encargado del campo del Gayro estuvo disponible para facilitar el acceso de la plantilla cadista sin que se jugaran el tipo escalando la verja o la tapia. Pero quedará para siempre la imagen del entrenador cadista Paquito y sus jugadores saltando la verja de entrada de un modo sumamente arriesgado. Pese a todos estos contratiempos se consigue salvar el descenso y lograr por primera vez en su historia la permanencia en Primera División.

Las instalaciones de “El Rosal” fueron definitivamente propiedad del equipo cadista en 1991.

APUNTES HISTÓRICOS_ por Juan Sevilla, Área de Historia Cádiz CF