En octubre de 1923 el Mirandilla FC viajó a Granada para jugar dos partidos amistosos frente al Español FC de Granada. Era el viaje más largo realizado hasta el momento por un equipo de fútbol gaditano.
En los primeros años veinte del siglo pasado, el fútbol en Cádiz era casi inexistente. El que fuera el primer equipo de la ciudad, el Español FC, que llegó a ser el primer Campeón de Andalucía en 1916, estaba en proceso de desaparición y ningún otro equipo de la ciudad parecía tener la fuerza suficiente para tomar el relevo. El más emergente de estos equipos alternativos era el del Colegio San Miguel, el Mirandilla FC.
El momento crucial para que el Mirandilla FC se convierta en el equipo principal de la ciudad se produce en octubre de 1923 cuando es invitado por el Español FC de Granada para jugar dos partidos amistosos en la ciudad nazarí en honor de los repatriados de Lusitania del Regimiento de Caballería que llegan a Granada de la Guerra del Rif. La noticia tiene una notable dimensión pública y supone un impulso decisivo en la resurrección del fútbol gaditano.
A diferencia de Cádiz, en Granada el fútbol está en su máximo esplendor, con cada vez más aficionados y sportmen. Hasta cinco equipos rivalizaban por la hegemonía del fútbol local: Real Sociedad FC, Granada FC, Balompédica, Unión Deportiva y el anfitrión mirandillista, el Español FC.
En la mañana del sábado 27 de octubre de 1923 la expedición mirandillista, comandada por su secretario José Llamas, toma el tren a Granada. Es el viaje más largo realizado hasta la fecha por un equipo de fútbol gaditano; y la primera vez que los “azulicremas” hacen noche fuera de Cádiz. Los partidos se jugarían en los dos días siguientes, el primero el domingo 28 y el segundo el lunes 29 de octubre. Los dos partidos se juegan en el Campo de las Cocheras de Tranvías y en los dos se alinearon los mismos once jugadores. Los del Mirandilla FC fueron: Pérez; Amiama, Jiménez; Cordones, Maño, Prieto; Gazzo, Mojica, Ramoné, Campos, Gutiérrez.
El primer partido, con fuerte lluvia y sin apenas público, finalizó con empate a cero. Durante la mañana siguiente los jugadores mirandillistas visitaron la ciudad y la Alhambra y por la tarde jugaron el segundo partido, ya sin lluvia y algo más de espectadores. En esta ocasión se imponían los locales por la mínima, aunque el Mirandilla FC falló hasta tres penaltis. La prensa granadina elogió el pundonor y buen papel realizado por los gaditanos. Tras los partidos se organizó un acto de convivencia. A la llegada a Cádiz una multitud se concentraba en la estación para recibir a los héroes del fútbol gaditano. Tal era el entusiasmo que algunos jugadores fueron llevados a hombros hasta la sede en el Colegio, donde se había organizado una fiesta de bienvenida con vinos, dulces, pastas y puros.
APUNTES HISTÓRICOS, Por Manolo Granado, Área de Historia Cádiz CF
