La temporada 1993-94, el Cádiz CF trataba de reforzar el equipo con jugadores extranjeros con el principal objetivo de poder enderezar el rumbo en la Segunda División y no dar con los huesos en la Segunda División “B”.
El 28 de noviembre de 1993, llegaba a Cádiz un joven futbolista internacional camerunés Serge Honi, nacido el 11 de septiembre de 1973, en Douala, la ciudad más grande de Camerún y su capital económica. El futbolista comenzó a jugar al fútbol en su país en el Canón Yaoundé FC, futbolista de gran altura 1,87 metros.
Honi, había sido internacional desde la categoría juvenil y en dos ocasiones había vestido la camiseta de la selección absoluta, en los encuentros disputados para la clasificación para el Mundial de Estados Unidos 94. El gran sueño de Honi era estar en el Mundial: “Esa es la gran ilusión que tengo y pienso que el futbol español me puede favorecer. La verdad es que la selección es lo que más me interesa en estos momentos. Pienso que aquí puedo elevar mi nivel, por eso digo que quería jugar en Primera, pero tampoco me preocupa hacerlo en Segunda”.
Honi, en su última temporada había sido el máximo goleador de su equipo con 22 goles, sobre el Cádiz CF comentaba: “Ricardo Fuica, mi representante, me hablo muy bien del equipo. Me dijo que llevaba varias temporadas en Primera División, y aunque la pasada temporada descendió, es muy buen equipo. Ahora las cosas no le están saliendo nada bien. También su amigo el guardameta Tommy N´Kono, me recomendó que viniera al Cádiz CF, ya que me dijo que es una entidad seria y que en las últimas temporadas había traspasado a varios jugadores a equipos importantes”.
Al día siguiente el futbolista acudió al entrenamiento en el estadio Carranza para ponerse a las órdenes del técnico José Antonio Naya, junto con el jugador ruso Gari Oleg con el fin de que el técnico pudiera ir comprobando el estado físico de ambos futbolistas, que se someterían a una prueba más concreta ya que los amarillos jugarían un encuentro en el estadio isleño de Bahía Sur frente al conjunto azulino. Días después el técnico tenía decidido es que el futbolista ruso, se marche tras la disputa del encuentro en Bahía Sur. Según el técnico: “El jugador ruso no es mejor de lo que hay aquí y con el camerunés se cubre ese puesto de delantero que le he pedido al Consejo de Administración, he pedido tres refuerzos, un defensa que ya lo tenemos, un delantero que puede ser el camerunés, y ahora estamos detrás de un centrocampista, pero todavía no hay nada”.
El miércoles 1 de diciembre los amarillos empatan a uno, en San Fernando. El gran interés era ver en acción al serbio Ilic, al camerunés Honi y al ruso Gary. Los dos primeros, que actuaron en la primera mitad, pasaron con nota el examen. Ilic evidenció muy buena colocación y sentido de la orientación, mientras que Honi apuntó cosas, pero notó una gran falta de acoplamiento. El ruso puso mucha voluntad, pero nada más.
Finalmente, el delantero internacional camerunés no terminó de convencer al técnico José Antonio Naya, por lo que vio en el partido en San Fernando y al día siguiente en el partidillo del jueves, descartó al futbolista al no verlo bien de forma. El que si le convenció fue el defensa serbio Aleksandar Ilic, que jugaría en calidad de cedido por el Atlético de Madrid, se uniría a los dos extranjeros que disponían en ese momento el primer equipo el croata Igor Stimac y el argentino Gustavo Acosta.
Tras no fichar por el equipo amarillo Honi, firmó por el CF Os Belenenses de la Primera División portuguesa, una temporada siendo en la siguiente temporada cedido al FC Famalicao de la Segunda División. Posteriormente se fue a Grecia donde pasó la mayor parte de su carrera profesional 11 años (1995-2004) nada menos, representando a ocho clubes diferentes, hasta su retiró del fútbol en junio de 2004, a la edad de 30 años.
APUNTES HISTÓRICOS_ por Francisco Rodríguez, Área de Historia Cádiz CF