0-2 | Tres puntos brutales
Con un gol de Alcaraz de penalti y un tanto de Chris Ramos, el Cádiz suma una victoria importante.
Siempre es de altas temperaturas un Betis – Cádiz, y en esta ocasión no iba a ser menos. Más allá de la temperatura ambiental, en el césped iba a ir subiendo la intensidad con el paso de los minutos. Desde el minuto cuatro de encuentro, con un disparo de Théo Bongonda que el portero local desviaba a córner. El primer aviso del partido tuvo color amarillo.
Iban a ser varios los intercambios de golpes que se iban a producir durante la primera media hora, aunque una vez llegado al 38 de partido el guion iba a cambiar por completo con la expulsión de Sergio Canales cuando este evitaba que Rubén Sobrino enfilara el camino a portería. Esta expulsión iba a apretar las tuercas de un partido que veía subida su intensidad.
Antes de llegarse al descanso, los amarillos iban a tener alguna que otra opción de adelantarse en el marcador. La más clara, un remate de cabeza de Sergi Guardiola que se iba por encima de la portería. Tras la reanudación, el partido volvería a sufrir otro giro de guion en el 52, cuando una mano de Juan Miranda propiciaba un penalti a favor del cuadro de Sergio González.
Rubén Alcaraz, desde el punto de penalti, batía a Rui Silva para adelantar al Cádiz CF en el marcador. La intensidad sobre el verde, en aumento por segundos. Seis minutos después, justo antes de cumplirse la hora de juego, Théo Bongonda iniciaba un contragolpe letal en el que cedía el balón en el último momento para la llegada de un Chris Ramos que metía el balón dentro de la portería para poner el cero a dos en el videomarcador.
Justo en la jugada posterior al segundo tanto cadista, el Betis iba a perder a Aitor Ruibal por roja directa. En este aspecto, los cadistas, con superioridad numérica, buscando seguir atacando mientras que el Betis no se rendía en la búsqueda de un gol que le volviera a meter en el encuentro. En el 68, Iza Carcelén tuvo que sacar con su propio cuerpo un remate a placer que se colaba en la portería.
Los cadistas supieron manejar a la perfección los tiempos para conservar el resultado y que los béticos no tuvieran acciones de peligro en los minutos finales. Finalmente, el resultado no se movería y los tres puntos se marchan a Cádiz.