El Cádiz CF se topó con la primera derrota en el retorno de competición liguera tras el parón. El conjunto amarillo frenó en su dinámica de sumar puntos en un partido feo y poco vistoso que estuvo marcado por la tempranera expulsión de José Mari, por roja directa, y por lo oportuno de los goles chicharreros, ya que Dani Gómez marcó justo antes del descanso y también a la vuelta del mismo.
El equipo amarillo comenzó el encuentro mandando y llevando la iniciativa con un Jurado muy participativo, pidiendo la pelota y empujando a los suyos hacia la portería del visitante Ortolá.
Pero el CD Tenerife contestó en la primera aproximación que tuvo y fue en un córner a favor, que cabeceó Álex Muñoz y sacó sobre la línea de gol un defensor cadista. El Tenerife tenía claro cómo había que jugarle al Cádiz y para ello tenía que saber aguantar los arreones cadistas para salir y hacer daño.
Superado el cuarto de hora de hora llegó otra acción peligrosa de peligro para los cadistas y cómo no en las botas de Jurado. El sanluqueño la cogió en la frontal y soltó un derechazo con rosca que obligó a Ortolá a emplearse a fondo para despejar a córner.
El encuentro se puso complicado en el 22’ de partido por roja directa a José Mari por plantillazo al tobillo de Aitor Sanz en un balón dividido en la medular. El roteño fue con todo a la disputa de la pelota llegando tarde y golpeando el tobillo del mediocentro tinerfeño.
La superioridad numérica, como no podía ser de otra forma, sentó de maravilla al equipo de Rubén Baraja, que se estaba cómodo en la medular y viendo que los amarillos estaban obligados a replegar y así los insulares fueron ganando terreno.
En esas llegó el gol del Tenerife, que se produjo al filo del descanso. Moore puso un gran servicio desde la derecha y el balón llegó pasado al segundo palo donde la cazó Dani Gómez entrando desde atrás.
Álvaro Cervera ese vio obligado a mover el banquillo en el descanso y así puso de inicio a Nano Mesa por Jurado y a Álvaro Giménez por Choco Lozano, que acabó el primer acto renqueante tras un lance del juego.
Pero el Tenerife estaba en estado de gracia y a las primeras de cambio hizo el segundo para poner más aún si cabe el encuentro cuesta arriba para los cadistas. Luis Pérez puso un medido centro por la derecha que cabeceó Dani Gómez para ponerla lejos ante la estirada de Cifuentes.
El Cádiz ponía todo su ímpetu y el máximo esfuerzo para enderezar la situación, pero no lograr sacar fruto de sus intentonas, mientras que el Tenerife hacía su partido y se plantaba con relativa facilidad en el área de Cifuentes. Así, Bermejo pudo hacer el tercero tras servicio por la derecha de Moore, pero su remate se marchó desviado.
El Cádiz acabó, como era de esperar, volcado y tuvo un buen disparo de Pombo para acortar distancias y un par de jugadas embarulladas fruto de varios córner, pero finalmente el marcador no se movió.
