Diego Garrido no piensa más allá del Melilla. El zaguero cadista, que recuperó la titularidad la pasada jornada en Écija, ha comparecido en rueda de prensa y ha destacado que “al mister no le ha dado tiempo todavía a profundizar en su sistema de juego. Hay que darle tiempo”.
El equipo jugó con una defensa novedosa. “Yo ya había actuado antes de libre y las sensaciones que tuve fueron buenas. Hubo momentos en el que el juego hacía que Tomás actuara más de extremo”. En la misma línea agregó que “el equipo tiene una nueva forma de trabajar, ni mejor ni peor que la anterior, pero en el preparador físico se nota que nos exige al máximo”.
Recordó la jugada del penalti: “Voy a disputar el balón y me da en la mano. Es penalti, porque aunque no es una acción intencionada todas las manos son penaltis”.
Tiene claro que el cambio en el banquillo del Cádiz CF es para “mejorar en confianza y la llegada del nuevo técnico nos aporta un soplo de aire fresco. Ahora nos hacen gol con nada y nos cuesta hacerlos, por eso tenemos que evadirnos de eso”.
Se mostró tajante al afirmar que “hace tiempo que tenemos un debe en nuestra cuenta y hay que ganar al Melilla y ya está. No miro más allá”.
