Mala tarde para el Cádiz que no encontró su buen juego en ningún momento ante el Tenerife. Los insulares pusieron las ocasiones pero lso amarillos apenas inquietaron a la portería de Dani.
Sólo dos cambios realizaba Álvaro Cervera de inicio, uno obligado y otro en el sistema. Garrido sustituía a Abdullah en el once titular, mientras que Nico Hidalgo volvía a la titularidad.
No era un partido igual a otros y se notaba. Ambos equipos se respetaban mucho, y las defensas se imponían a los ataques, lo que dejó una primera parte con muy pocas ocasiones.
En el minuto 8 llegó el primer acercamiento visitante con un tiro de Amath que despejó Cifuentes, y en el rechace el tiro de Omar fue repelido en línea de gol. La reacción cadista llegó, pasando a controlar el juego y a aproximarse al área de Dani.
Pero en el minuto 36 Álvaro Cervera se encontró con el contratiempo de la lesión de Garrido, que tuvo que ser sustituido por Iván Malón, lo que pasó a Javi Carpio al doble pivote. Justo antes del descanso una falta directa ejecutada por Brian que despejó Dani, fue la ocasión más peligrosa de los amarillos.
En la reanudación cambió poco el panorama, pero fue el Tenerife el que tuvo las aproximaciones más peligrosas. Primero con una falta directa de Aarón que se marchó pegada al palo, y a continuación con dos tiros de Amath que se encontró con un bien posicionado Cifuentes.
Cervera movió más el banquillo a falta de media hora introduciendo a Aketxe por Rubén Cruz. También hizo lo propio Marí, con un doble cambio retirando a Omar y Aarón que tenían cartulina amarilla, dando entrada a Suso y Jouini. Precisamente la ocasión más clara de los chicharreros partiría de Suso, con la ejecución de una falta que cabeceó Germán y salvó Cifuentes en la misma línea de gol.
Tocaba agotar los cartuchos y el técnico cadista introdujo a Salvi por Nico Hidalgo en el minuto 75. Se intentó poner cerco a la portería de Dani, pero dos saques de esquina consecutivos no llegaron a ser rematados para intentar probar fortuna.
Pero a falta de tres minutos el Tenerife iba a conseguir adelantarse en el marcador. Un mal despeje de Sankaré dejó a Suso con metros por delante para poner un certero centro que Amath remató con un fuerte chut que entró por la escuadra.
A partir de ahí más corazón que cabeza en los cadistas, pero irremediablemente los tres puntos acabaron volando de Carranza.
